La decisión del intendente de Paysandú de implementar un pago por el uso intensivo de la caminería rural, generó oposición generalizada de diversas instituciones, gremiales, incluso del ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, consignó El Telégrafo. El jerarca expresó que le parece “un disparate”. Explicó: “No estoy de acuerdo con el título ‘el que rompe paga’. El que trabaja ya está pagando, debe recibir los servicios correspondientes al Estado”.

Al conocerse la decisión de la intendencia sanducera, la Asociación Rural del Uruguay emitió un comunicado en el que “se opone categóricamente a esta medida”. Consideran que “los productores ya aportan recursos” a la caminería. “El uso más eficiente de los recursos permitirá recomponer los caminos, pero nunca a través de lo que termina siendo un impuesto encubierto”.

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